Tzipi Livni es una figura clave en el siglo XXI de Israel. Exministra de Relaciones Exteriores, es la mujer que más alto llegó en el entramado político del país, después de Golda Meir. En 2019, luego de unas malas encuestas de cara a las elecciones, la líder de Hatnuah decidió dejar la política.
En los últimos días, se conoció que Livni comenzaría una carrera en el sector privado. Más precisamente, como asesora de Cantek, una empresa dedicada a la industria de la marihuana.
Desde que en 1964 el profesor Rafael Meshulam del Instituto Weizmann, de Rehovot, Israel, logró por primera vez identificar y aislar una de las sustancias activas de la marihuana, el THC (tetra-hidro cannabinol), el sector cannábico viene creciendo a pasos agigantados. Este fenómeno no solamente ocurre en Israel sino también en el mundo. Por esa razón, no parece raro que figuras de la talla de Livni se acerquen a él.
La exparlamentaria no es la única política israelí en desarrollar tareas en el sector privado cannábico. Dos exprimeros ministros, Ehud Olmert y Ehud Barak también incursionaron en esta actividad.