Binyamina, al norte del país, fue catalogada como «en rojo» por las autoridades sanitarias, debido al rebrote de COVID-19. Es la primera localidad que se pinta de este color desde hace meses.
Con una tasa de positividad de 3%, diez veces más que en el resto del país, la ciudad cercana a Haifa es la única en ese color. Modín, otra ciudad que sufrió un rebrote en los últimos días, está en naranja. La mayoría de las ciudades se mantienen en verde o amarillo.
El sistema semáforo asigna colores según una serie de factores. Entre ellos, casos nuevos por habitantes, positividad y aumento de internaciones. Binyamina suma 8 puntos en la escala del 1 al 10.
A nivel nacional, el gobierno advierte una aceleración de casos de COVID-19. Frente a este escenario, desde el ministerio de Salud comenzaron a restablecer restricciones. En principio, las máscaras vuelven a ser obligatorias en espacios cerrados.
El rebrote en Binyamina se localizó en una escuela. 44 niños dieron positivo, y la ciudad de 15.000 habitantes tiene ahora más de mil personas aisladas. La variante Delta, proveniente de la India y ultracontagiosa, explica los nuevos casos.
La naturaleza de este rebrote, en una escuela, motivó al gobierno a profundizar su llamado a la vacunación de niños. Si bien ya estaba abierta, son todavía pocos los que se inmunizaron.
Según las estadísticas del Ministerio de Salud, el 60% de los residentes de Binyamina están completamente vacunados y el 63% ha recibido al menos una inyección de la vacuna COVID.