La Policía de Israel convocó al Primer Ministro Biniamín Netanyahu para un nuevo interrogatorio en la investigación Case 4000 luego de que el testigo del estado y ex asesor de Netanyahu, Nir Hefetz, le entregara nuevas pruebas, lo que parece implicar a su antiguo jefe, informó Canal 2.
La investigación del Caso 4000 gira en torno a los lazos del primer ministro con el accionista mayoritario de Bezeq, Shaul Elovitch, y la sospecha de que disfrutaba de una cobertura favorable en el periódico Walla. El sitio web de noticias, que es propiedad total de Bezeq, lo hacía a cambio de beneficios para su empresa, uno de los gigantes de las telecomunicaciones israelíes.
Según los informes, Hefetz proporcionó pruebas para respaldar la afirmación de la policía de que los favores intercambiados entre los dos no eran una coincidencia, sino más bien parte de un trato ilícito de quid pro quo del que ambos eran plenamente conscientes.
“Entendí que estaba dispuesto a suicidarse por mí”. Esa frase explosiva es la descripción de Shaul Elovitch de la asistencia gubernamental que su corporación Bezeq recibió del primer ministro Biniamín Netanyahu. Elovitch hizo este comentario en el verano de 2015, poco después de que Netanyahu, quien también era ministro de Comunicaciones en ese momento, alegrara su corazón al aprobar una fusión entre la corporación de telecomunicaciones y la compañía de televisión satelital Yes.
Elovitch también se jactó de que la cobertura favorable de Netanyahu en el sitio de noticias de internet de Bezeq, Walla, había ayudado al primer ministro a ganar las elecciones de ese año, y agregó que le “debe” a Netanyahu porque este último ganó en su nombre “contra todos”.
Estas citas y otras como ellas muestran que Elovitch vio su relación con Netanyahu como una de quid pro quo y vio la cobertura inclinada de Walla sobre el primer ministro como directamente relacionada con el trato del gobierno con Bezeq. Las conversaciones fueron obtenidas por la policía como parte de su investigación del caso de soborno Bezeq-Walla.