El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, se encontró ayer con los embajadores de Israel en América Latina, Asia y África en una conferencia celebrada en el ministerio de Relaciones Exteriores de Israel.
El mandatario israelí dio su punto de vista de lo que está sucediendo en la región: “Se está dando un gran cambio, el mundo árabe necesita de la tecnología y la innovación, en materia de agua, electricidad, medicina y alta tecnología. Se está creando una conexión entre empresas israelíes y el mundo árabe», dijo Netanyahu. «Nos encontramos en un proceso de normalización con el mundo árabe sin que se registre un avance en el proceso político con los palestinos», agregó.
Además, Netanyahu habló sobre lo que supuestamente debía ocurrir con el mundo árabe respecto al proceso de paz con los palestinos: «La expectativa era que el progreso o avance con los palestinos nos permitirían abrir las relaciones con el mundo árabe y esto hubiera sido cierto, si hubiera ocurrido. Esto parecía a punto de concretarse, en el inicio de los Acuerdos de Oslo, pero lo que sucedió es que el rechazo árabe junto al terrorismo de la Intifada provocaron cerca de dos mil muertes israelíes, y han acabado con esta esperanza».
«Hoy nos encontramos en esta vía, sin el involucramiento de los palestinos, y es mucho más sólido porque no depende de sus caprichos. Los estados árabes están buscando una relación con los fuertes. El desarrollo de nuestras potencialidades nos otorga poder diplomático», explicó Netanyahu.
El mandatario también hizo su pronóstico sobre cómo seguiría el desarrollo de las relaciones con los países árabes y si estas terminarían dependiendo finalmente del avance en el proceso de paz con los palestinos: «Es más probable que funcione a la inversa, que los lvínculos con el mundo árabe traigan consigo la normalización y creen las condiciones para el desarrollo de las relaciones con los palestinos”.
El reestablecimiento de las relaciones con los países árabes ha sido un tema central para Netanyahu durante los últimos meses. El mes de octubre visitó de forma inesperada Omán y se reunió con el sultán Qaboos e incluso luego afirmó que el país había dado su permiso para que aviones israelíes volaran sobre su territorio. Además, el presidente de Chad, un país musulmán en África visitó también Israel y se conversó sobre el reestablecimiento de las relaciones entre las dos naciones y un futuro viaje de Netanyahu al país.