La cooperación de inteligencia israelí con sus aliados árabes frustra el terrorismo iraní

Símbolo de la Embajada de los Emiratos Árabes Unidos en Addis Abeba, imagen a través de Twitter @UAEthio

La magnitud de la amenaza terrorista en el Medio Oriente ha crecido de manera constante desde el comienzo de la llamada «Primavera Árabe». La necesidad de modernizar la inteligencia al servicio de la lucha contra el terrorismo es un tema de especial preocupación para los estados del Golfo Pérsico, que comparten el objetivo común de impedir la expansión de la red terrorista transnacional de Irán y reducir el daño causado por las milicias chiitas afiliadas a Irán. La cooperación de inteligencia recién formada entre Israel y varios Estados árabes ya ha frustrado ataques iraníes.

La retirada a gran escala de las fuerzas militares estadounidenses del Medio Oriente, que ocurrió durante las administraciones de Barack Obama y Donald Trump, le dio a Irán la oportunidad de dominar la región. La retirada estadounidense hizo que los Estados del CCG [Concilio de Cooperación del Golfo] desconfiaran aún más de la influencia maligna y las intenciones de Teherán.

Los nuevos acuerdos de paz entre Israel y sus nuevos aliados árabes en la región, que encontraron puntos en común con Jerusalén sobre su mutuo miedo al régimen iraní, hicieron más que asegurar la libertad de navegación en aguas internacionales. Abrieron el Golfo Pérsico a la inteligencia israelí, una consecuencia que fue un shock para los mulás en el aislado Irán. El régimen está en la búsqueda de ser la hegemonía regional y persigue ese objetivo a través del terrorismo y una carrera tenaz para alcanzar armas nucleares. Irán amenaza la libertad de navegación en el Golfo Pérsico y el Estrecho de Ormuz y apoya las operaciones de la red terrorista transnacional chií que construyó con esmero.

Durante los últimos dos meses el Mossad de Israel alertó a las comunidades de inteligencia de sus nuevos aliados árabes sobre las amenazas provenientes de Irán, y la embajada de Israel en Etiopía se puso en alerta máxima. Se sospechaba que Irán, que atacó a las embajadas en la década de 1990 con la ayuda de al-Qaeda, estaba planeando una ola terrorista similar, esta vez para enviar un mensaje a la administración Biden de que tiene que hacer un trato con Irán y hacerlo rápido.

Se cree que el Mossad transmitió el mensaje a sus aliados árabes de que Irán estaba planeando una serie de ataques contra objetivos israelíes, de los Emiratos Árabes Unidos y de Estados Unidos en todo el mundo, particularmente en África. El 15 de febrero de 2021 las autoridades etíopes arrestaron a 16 sospechosos que estaban planeando un ataque a la embajada de los Emiratos Árabes Unidos en Addis Abeba. Según las autoridades etíopes, la célula iraní también había planeado un ataque contra la embajada de los Emiratos Árabes Unidos en Sudán.

Como indican estos arrestos, la cooperación en contraterrorismo entre Israel y sus aliados árabes obstaculizará la capacidad de la Fuerza Quds del IRGC para activar células durmientes y llevar a cabo ataques terroristas.

Los ataques terroristas iraníes planificados contra las embajadas israelí, emiratí y estadounidense en un país no especificado del este de África se frustraron en enero gracias a esta nueva cooperación de inteligencia. Irán había enviado agentes al este de África para recopilar información de inteligencia sobre esas embajadas, con el fin de llevar a cabo futuros ataques. Algunos de los agentes involucrados eran ciudadanos europeos con doble ciudadanía iraní, incluido el autor intelectual del frustrado complot.

Las tensiones son altas en la región por las preocupaciones de que el presidente Biden regrese al acuerdo nuclear de la era de Obama con Teherán y levante las sanciones impuestas a Irán por el presidente Trump. La forma que adoptará la diplomacia nuclear de Biden con Irán aún no está clara, pero es de esperar que tenga en cuenta la amplia información de la comunidad de inteligencia estadounidense sobre el apoyo y la dirección de Irán a los grupos terroristas.

Fuente: BESA Centro Begin-Sadat de Estudios Estratégicos

Erfan Fard es analista antiterrorista e investigador de estudios de Oriente Medio con sede en Washington.

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