El Ministerio de Salud anunció que, en las últimas veinticuatro horas, se han registrado 1.523 nuevos contagios por la nueva enfermedad COVID-19. Ayer, miércoles se realizaron 70.386 pruebas para diagnosticar el virus, con una tasa de positivos del 2,2%.
Un total de 267 enfermos, internados en hospitales, se encuentra en grave estado, entre ellos 99 que están siendo asistidos por respiradores artificiales.
Desde el comienzo de la pandemia han fallecido 2.883 personas por el virus en Israel.
El Ministerio de Salud ha recomendado el cierre de los centros comerciales (shoppings) mientras acepta que se mantenga abierto el sistema educativo.
El ministro de Educación, Yoav Galant, le dijo a la radio estatal Kan, que está prevista la reiniciación de las clases en los cursos intermedios. “El sistema educativo es un espejo del entorno y del cuadro de morbilidad de la localidad”, apuntó el ministro. “Mientras los ciudadanos cumplan con las directrices, a mi no me preocupa. La mayoría de los enfermos en el sistema escolar se encuentran en las ciudades rojas. De cualquier manera, cuando una ciudad se convierte en roja, cerraremos desde el quinto grado para arriba”.
Ayer se informó sobre el primer caso fatal en Israel de una persona que se enfermó del virus por segunda vez. Se trata de un hombre de 74 años, que había contraído el virus por primera vez en agosto y estuvo internado en el Hospital Beilinson, de Petaj Tikva, en grave estado. Tras recuperarse se le realizaron tres pruebas de diagnóstico que resultaron negativas, y recientemente volvió a ser internado, meses después de la primera hospitalización. Últimamente, había sido diagnosticado positivo con una presencia muy alta del virus.