Una serie de incendios forestales de gran magnitud afecta gravemente a Israel, obligando a evacuar carreteras, suspender servicios ferroviarios y desplegar refuerzos militares y aéreos en varias regiones del país. Al menos 12 personas han resultado heridas, principalmente por inhalación de humo.
Las llamas alcanzaron la autopista 1, la principal vía que conecta la costa con Jerusalén, donde decenas de conductores quedaron atrapados y algunos abandonaron sus vehículos para huir a pie. “Oh, Dios mío, lo siento, siento el calor”, gritó una mujer atrapada en su coche mientras el fuego se acercaba.
Los bomberos y equipos de rescate trabajan sin descanso con más de 120 unidades terrestres y 10 aviones hidrantes desplegados. La propagación errática del fuego, impulsada por fuertes vientos y condiciones secas, ha obligado a cerrar múltiples accesos viales. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) fueron movilizadas para apoyar la evacuación de zonas afectadas.
Ante la gravedad de la situación, Israel solicitó ayuda internacional urgente. Grecia, Chipre, Croacia, Bulgaria e Italia se comprometieron a enviar aeronaves especializadas, incluyendo el “superpetrolero”, uno de los aviones de extinción más grandes del mundo.
La Autoridad de Bomberos y Rescate informó que al menos seis focos activos rodean las colinas que conducen a Jerusalén, mientras que en el norte del país se combaten al menos 15 incendios adicionales. Las autoridades ordenaron la suspensión de los servicios de tren hacia Jerusalén, con todos los viajes finalizando en el Aeropuerto Internacional Ben Gurión.
Las ceremonias del Día de los Caídos también se vieron interrumpidas. El Ministerio de Defensa pidió a las familias que eviten acudir a los cementerios, advirtiendo sobre el riesgo de propagación acelerada del fuego y la caída de estructuras debido al viento.
Las autoridades han hecho un llamado nacional a las reservas de bomberos y personal de emergencia para reforzar las tareas de contención.