Implicaciones para Israel del ejercicio militar terrorista conjunto en la Franja de Gaza

Maniobras de los grupos terroristas palestinos en Gaza Foto: Jihad Islámica

El primer ejercicio militar conjunto de las organizaciones terroristas de Gaza fue un hito para Hamas, que desea unir estas organizaciones para fortalecer su control sobre la Franja, así como su “estrategia de ambigüedad” frente a Israel. El ejercicio tiene implicaciones para Israel tanto a nivel estratégico como operacional, ya que se prepara para una posible conflagración en Gaza.

El gran ejercicio militar realizado el 29 de diciembre de 2020 en la Franja de Gaza, el primero en involucrar a todas las organizaciones terroristas que operan en la Franja bajo la rúbrica de un «Cuartel General de Operaciones Conjuntas», fue diseñado para lograr varios objetivos:

  • transmitir un mensaje al público israelí y gazatí de que las organizaciones terroristas en la Franja de Gaza están unidas para hacer frente a las amenazas a la seguridad, ya sean de Israel o de la oposición interna al régimen de Hamas
  • permitir que Hamas y las organizaciones terroristas se preparen para una campaña militar contra Israel, que supuestamente será dirigida por el «Cuartel General de Operaciones Conjuntas»
  • señalar a Israel y Estados Unidos que no es deseable atacar objetivos iraníes antes del final del mandato del presidente Trump.

El mensaje que Hamas trató de transmitir sobre la unidad de las organizaciones terroristas es muy importante para la organización. Hamas debe presentar un frente unido y la impresión de consenso para el público de Gaza, especialmente a la luz de la pandemia del coronavirus, que está desafiando a Hamas en los frentes económico y de salud pública. La unidad militar de los grupos terroristas liderados por Hamas indica que la organización goza de un amplio apoyo popular y la “calle” debería descartar la posibilidad de desafiar al régimen, como sucedió varias veces en los últimos años. Al mismo tiempo, Hamas quiere dejar claro a Israel que no tiene un control absoluto sobre los otros grupos terroristas en la Franja, en particular los ataques con cohetes de «organizaciones recalcitrantes» que no responden a Hamas.

El último punto es parte de la estrategia de ambigüedad de Hamas. El argumento de que algunos ataques contra objetivos israelíes son llevados a cabo por organizaciones que no pertenecen a Hamas, tiene como objetivo alentar a Israel a reducir el número y la gravedad de los ataques de represalia que realiza contra objetivos de Hamas en respuesta a tales ataques.

Para la Jihad Islámica, que se identifica con Irán, es importante que se interrumpa la estrategia de Israel de dividir y gobernar en la Franja de Gaza. Esta estrategia se vio en acción durante las dos últimas rondas de lucha en la Franja, en noviembre de 2019 y febrero de 2020, cuando Israel se centró en atacar los objetivos de la Jihad Islámica y dejó en paz a los objetivos de Hamas. Hamas captó la indirecta y no intervino durante estas rondas de conflicto. Al adoptar este enfoque, Israel trató de socavar la unidad de filas en la Franja de Gaza y provocar una ruptura entre Hamas y la Jihad Islámica. Por esta razón, el reciente ejercicio militar conjunto fue un paso significativo e incluso vital para la Jihad Islámica.

La necesidad de presentar un frente unido se reflejó en la febril creación, difusión y comercialización de mensajes de los medios de comunicación para el consumo público de Hamas tanto en Israel como en la Franja de Gaza antes y durante el ejercicio. El nombre dado al ejercicio, Ar-Rukn ash-Shadid (Pilar Fuerte), estaba destinado a expresar la unidad entre las filas. Hamas distribuyó directrices a los periodistas, incluido un llamado a la difusión generalizada de fotos y videos del ejercicio en todas las plataformas de medios, incluidas las redes sociales, nuevamente como un medio para impulsar el mensaje de unidad organizativa.

Incluso antes del ejercicio, el “Cuartel General de Operaciones Conjuntas” permitió la toma y publicación de fotos y videos promocionales mostrando las organizaciones, unidades y armas que iban a participar. Esto fue notable, ya que Hamas rara vez permite que decenas de periodistas, fotógrafos y gente de los medios vayan a sus áreas y documenten lo que ven. Al comienzo del ejercicio, un portavoz del ala militar de Hamas celebró una conferencia de prensa muy publicitada de la que se distribuyeron muchas fotos y videos en los medios árabes y en las redes sociales. Al final del ejercicio, los niños y adolescentes fueron llevados al área de entrenamiento para tomarse selfies de pie sobre los modelos de tanques israelíes que habían sido utilizados como blancos durante el ejercicio.

Más allá de la dimensión de relaciones públicas, el ejercicio conjunto tenía un propósito práctico: permitir que Hamas y las organizaciones terroristas en la Franja de Gaza se prepararen y se capaciten para una posible campaña militar contra Israel mientras mejoraban las posiciones y realizaban ajustes a nivel interinstitucional.

El ejercicio incluyó el lanzamiento de cohetes hacia el mar para probar la continuidad del lanzamiento, así como la realización de ataques accediendo a la costa con lanchas y buzos de la fuerza de comando naval. Además, se realizaron ensayos de maniobras terrestres, emboscadas a vehículos militares y secuestros de soldados israelíes. Un simulacro de invasión israelí de Gaza se frustró mediante un poderoso bombardeo de artillería acompañado por un rápido despliegue de fuerzas terrestres, fuego de francotiradores y un ataque de vehículos aéreos no tripulados. El ejercicio también incluyó esfuerzos de las fuerzas de defensa civil para rescatar a civiles de los escombros, extinguir incendios, detener fugas y controlar la propagación de materiales peligrosos. Es probable que Hamás también practicara la lucha clandestina, aunque estas operaciones no se filmaron por razones de seguridad.

Hamas no mostró nuevas armas o capacidades durante el ejercicio. En el pasado, ha utilizado comandos navales, drones y misiones de fuerzas especiales para atacar el territorio israelí, incluso desde túneles subterráneos, sin mencionar el fuego sostenido de cohetes y misiles de largo alcance. Aunque no se exhibió material nuevo, Hamas y las otras organizaciones terroristas en Gaza están mejorando y refinando constantemente sus capacidades operativas y armas, incluido el alcance, la precisión y la potencia de fuego de sus cohetes.

Si bien Hamas probablemente desee unir fuerzas con otras organizaciones terroristas y prepararse para una futura campaña militar contra Israel, la idea del ejercicio conjunto podría no haberse originado en Gaza. Fuentes palestinas en Gaza informaron que fue Teherán quien pidió a Hamas y la Jihad Islámica que organizaran el ejercicio para enviar un mensaje a Israel y Estados Unidos de que el “Eje de Resistencia” liderado por Teherán está vivo y coleando.

La evidencia de la participación iraní se vio en la exhibición por Hamas de numerosos carteles de Qassem Soleimani, quien murió en un ataque aéreo de Estados Unidos en enero de 2020, así como del secretario general de Hezbolá, Hassan Nasrallah. Nasrallah, sorprendentemente, aludió al ejercicio un día antes de que ocurriera como «un paso importante y una demostración de fuerza que asusta al enemigo israelí».

Para Israel, el ejercicio conjunto representa una amenaza multidimensional. Las FDI deben prepararse para una campaña militar en la que operará a alta intensidad en una variedad de dimensiones simultáneamente: en el aire, cerca del suelo (con drones), en tierra, en el mar, en el ciberespacio y en túneles subterráneos. Las FDI también deberían prepararse para la posibilidad de una cooperación de combate más amplia entre las organizaciones terroristas de Gaza, que hasta ahora se ha limitado principalmente a lanzamientos conjuntos de cohetes. El ejercicio conjunto puede presagiar un combate operativo conjunto en otras áreas y en múltiples dimensiones. Las FDI tendrán que hacer ajustes a nivel estratégico, operativo y táctico en términos tanto de sus armas como de su preparación para el combate multidimensional y las maniobras con múltiples ramas.

Además, Israel debe continuar enviando mensajes disuasorios a Hamas y la Jihad Islámica para mantener la próxima campaña lo más lejos posible. Esto podría incluir asesinatos selectivos de altos miembros de estas organizaciones, así como indicios de que está dispuesto a participar en maniobras terrestres en las profundidades de la Franja de Gaza. Las FDI deben transmitir que tienen tanto la capacidad militar como la determinación para una confrontación total rápida y decisiva que derrotará por completo a los grupos terroristas en Gaza.

El mismo día en que se llevó a cabo el ejercicio terrorista conjunto en Gaza, las FDI llevaron a cabo su propio ejercicio militar en la región sur. Y aunque las FDI afirmaron que el ejercicio era simplemente parte de su programa de entrenamiento de 2020, uno se pregunta por la coincidencia de que los dos ejercicios opuestos se realizaran simultáneamente.

Fuente: BESA Centro Begin-Sadat de Estudios Estratégicos

Omer Dostri es especialista en política exterior. Ha realizado una pasantía en el Centro de Estudios de Oriente Medio de la Universidad de Ariel, el Instituto de Estudios de Seguridad Nacional y el Taller de Ciencia, Tecnología y Seguridad Yuval Ne’eman en la Universidad de Tel Aviv. Es candidato a Ph.D. en la Universidad Bar-Ilan.

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