La amenaza actual contra Israel no es externa, sino interna: yace en la polarización de la sociedad, advirtió el ex jefe del Mossad, Tamir Pardo, al hablar durante una marcha en conmemoración de los soldados drusos caídos.
En su primera aparición pública, tras haber dejado la agencia de inteligencia, Pardo indicó que teme que el país esté encaminándose hacia la guerra civil.
«Creo que en el momento en que en una sociedad se inicia un proceso de división, una división interna, y se cruza un umbral determinado, se puede llegar a fenómenos tales como la guerra civil, en el caso extremo», declaró. «La brecha entre la situación en la que estamos, y una situación de guerra civil, que es el punto extremo, se hace cada vez más pequeña. Por desgracia creo que vamos en esa dirección».
Las amenazas existenciales externas, tales como Irán, no existen realmente, dijo a la multitud reunida.
«No creo que exista una amenaza existencial externa en este momento. Lo he dicho más de dos o tres veces. Lo he dicho abiertamente y claramente cuando me han preguntado. No creo que exista» añadió Pardo, quien puntualizó que «la cuestión de una amenaza existencial no depende del acuerdo de Irán, sino de la fortaleza de Israel».
El camino para el cambio, apuntó, está en manos de la gente.
«La responsabilidad de la división se encuentra en el nivel inferior – La dirección nacional tiene responsabilidad, por supuesto, pero el cambio vendrá de abajo hacia arriba, no de arriba hacia abajo».
Pardo también pidió al primer ministro, Biniamín Netanyahu, que siga trabajando hacia una solución de dos estados con los palestinos.
Sin una solución, puntualizó, «nunca seremos capaces de lograr la normalización con nuestros vecinos árabes».
En los últimos meses, Netanyahu ha elogiado el mejoramiento de las relaciones con varios países árabes.
Pardo se desempeñó durante 35 años en el Mossad. Ha sido reemplazado por Yossi Cohen, ex asesor de Seguridad Nacional del primer ministro Netanyahu.
El servicio secreto Mossad fue establecido el 13 de diciembre de 1949, por recomendación del entonces primer ministro David Ben Gurion y ha realizado desde entonces numerosas misiones legendarias en todo el mundo.