Un estudio desarrollado por la Universidad de Tel Aviv descubrió una conducta muy particular de parte de los murciélagos. Estos mamíferos voladores se aíslan al estar enfermos, buscando evitar el contagio.
En un estudio publicado en la revista de la Academia de Ciencias de Nueva York, el equipo liderado por el doctor Yossi Yovel analizó este tipo de conductas. Para eso, monitorearon colonias de murciélagos, incluyendo cinco que estaban enfermos.
Mediante GPS, los científicos pudieron observar las colonias de murciélagos, específicamente la especia Rousettus aegyptiacus, o murciélago egipcio de la fruta.
El experimento nació a partir de la observación de Maya Weinberg. Esta científica recordó la conducta de los murciélagos luego del comienzo de la pandemia de COVID-19. Este paralelismo con el comportamiento humano fue el puntapié para el estudio.
Los murciélagos son uno de los animales más sociables. Por eso, esta conducta sorprende tanto. Además, es algo que no es común en el reino animal, donde la mayoría de los animales busca «esconder» la enfermedad para evitar debilidades.
Este comportamiento de los murciélagos podría ser beneficioso para los humanos. Al reducir la posibilidad de contagio, los murciélagos están también reduciendo la posibilidad de transmitir infecciones a otras especies, entre ellas, la nuestra.