Efectivos de la policía israelí irrumpieron el viernes por la noche en el Monte del Templo de Jerusalén, luego de que palestinos arrojaran botellas y piedras a los oficiales, bajo el telón de fondo de los crecientes choques en la ciudad santa, en el mes de Ramadán, sagrado para los musulmanes.
La Policía de Israel anunció que sus “fuerzas empezaron a restaurar el orden, usando métodos antidisturbios en el Monte del Templo, en los cuales cientos de sospechosos comenzaron a arrojar piedras, botellas y objetos a los oficiales de la policía”.
El vocero policial dijo que al menos tres oficiales resultaron heridos.
La Medialuna Roja Palestina aseveró que 53 palestinos resultaron con lesiones, entre ellos 23 que tuvieron que ser hospitalizados, incluyendo uno que recibió el impacto de una bala de goma en la cabeza.
Videos de los incidentes muestran a palestinos arrojando sillas, zapatos, botellas y piedras, y policías respondiendo con gases lacrimógenos, bombas de estruendo y balas de goma.
Varios de los heridos fueron evacuados en camillas, mientras la muchedumbre gritaba “Allahu Akbar” (Dios es grande).
“No permitiremos disturbios, violencia e intentos de dañar a los oficiales de la policía aprovechando la libertad de culto y religión y tratando de convertirla en un incidente de violencia”, agregó el vocero policial.
La policía bloqueo las callejuelas que conducen al sitio para impedir el ingreso de más revoltosos que fueron llamados por los manifestantes a acercarse al lugar.
El Monte del Templo de la Ciudad Vieja, donde estaban erigidos en la Antigüedad los templos bíblicos, es el lugar más sagrado del judaísmo. Allí están situados el Domo de la Roca y la Mezquita de Al Aqsa, está última es un santuario sagrado en la tradición islámica, porque se la vincula con el relato del ascenso de Mahoma al cielo; aunque Jerusalén fue conquistada por los musulmanes seis años después de la muerte del profeta del islam.
El domingo por la noche, los musulmanes celebran la “Noche del Destino”, la más sagrada del mes de Ramadán. Los feligreses se congregarán para los rezos en la Mezquita de Al Aqsa, y se teme que crezca la tensión en el sitio.
El domingo por la noche también se comienza a celebrar el Día de Jerusalén, en el cual Israel celebra la reunificación de la ciudad tras la Guerra de los Seis Días de 1967, y se prevén desfiles del movimiento nacionalista religioso judío en la ciudad santa.
Durante los rezos del viernes, algunos de los feligreses palestinos agitaron banderas del grupo terrorista Hamás e instaron al grupo a perpetrar ataques contra Israel.
“Todos somos Hamás, esperando las órdenes del comandante Mohammad Deif. Oh, Hamás, dispara cohetes esta noche a Tel Aviv”, cantaban algunos de los congregados, según un reporte del Canal 12.
El martes, el comandante de Hamás en Gaza, Deif advirtió a Israel que pagaría un precio muy caro si se lleva adelante el desalojo de palestinos en el barrio Sheik Jarrah de Jerusalén, por lo que se teme una reactivación de la violencia alrededor de ese asunto.
La Corte Suprema de Justicia está por decidir el desalojo de cuatro familias palestinas del vecindario de Sheik Jarrah, en el marco de una disputa legal con integrantes de miembros de la derecha israelí que tratan de recuperar la propiedad.