Hoy, martes, se preveía la intensificación de las protestas en la comunidad etíope israelí debido a la muerte de un joven desarmado a manos de un policía, que estaba fuera de servicio, en el barrio de Kiriat Haim, de la ciudad de Haifa. Mientras tanto, la policía ha advertido que responderá con firmeza a cualquier hecho de violencia.
Cientos de manifestantes incendiaron neumáticos y bloquearon las carreteras en la noche del lunes en la zona de Haifa y en otros lugares del país por la muerte de Solomon Tekah, de 19 años.
Miembros de la comunidad dijeron que planean protestas masivas en todo el país y tomar las calles como en la campaña de 2015, que terminó en violentos enfrentamientos entre miles de manifestantes y la policía en la Plaza Rabin de Tel Aviv.
Miles de personas tomaron las calles para acusar a la policía de prejuicio y brutalidad contra los etíopes israelíes al grito de: “Blanco, negro, todos somos humanos”.
Tres policías resultaron heridos en Haifa, cuando numerosos manifestantes arrojaron piedras, petardos, encendieron neumáticos y bloquearon el tráfico en la ciudad. Las protestas se difundieron a otras urbes. Una de ellas tuvo lugar frente a la residencia del ministro de Seguridad Interior, Gilad Erdan.
El primer ministro, Benjamín Netanyahu, prometió que las autoridades investigarán rápidamente la muerte de Tekah; mientras que el oficial involucrado en el hecho fue puesto en arresto domiciliario.
La pesquisa está siendo conducida por el Departamento de Investigaciones Internas de la Policía. La radio estatal Kan dijo que el resultado de la biopsia no pudo confirmar las afirmaciones del oficial, quien alega que disparó hacia el suelo y que la bala rebotó e hizo impacto en Tekah. El examen de los patólogos resultó inconcluso debido a la víctima fue intervenida quirúrgicamente en el hospital en un infructuoso intento por salvarle la vida. Los científicos de la Policía esperan analizar la bala para sacar conclusiones que permitan aclarar el caso.
Tekah recibió el disparo fatal durante un altercado en el vecindario de Kiriat Haim. El oficial alega que estaba tratando de detener una pelea callejera con la que se había topado, cuando fue atacado por tres jóvenes que le arrojaron piedras, poniendo su vida en peligro. Sin embargo, un testigo dijo a los detectives que el agente no parecía estar en peligro cuando abrió fuego.
La investigación gira en torno sobre si el agente tenía algún justificativo para sacar el arma y disparar en dicha situación, y determinar si Tekah fue efectivamente alcanzado por el rebote de la bala. El Departamento de la Policía dijo que investigará rápidamente el caso debido a la sensibilidad del hecho.
La muerte de Tekah ha vuelto a desatar intensas protestas de la comunidad etíope israelí que acusa a la policía de brutalidad, gatillo fácil y racismo.