Exposición “De vuelta a la naturaleza”
Ante la renovada posibilidad de pasar tiempo en espacios abiertos, estos se vuelven particularmente atractivos. Por eso el Jardín Botánico de Givat Ram en Jerusalén, el más grande de Israel y el único de su tipo en el Medio Oriente, ofrece nuevamente visitarlo y caminar libremente por sus hermosos coloridos y muy cuidados senderos y espacios, mientras que a través de la naturaleza abierta y la observación proporcionan verdadera relajación, paz y equilibrio para el alma.
En el Botánico se acaba de inaugurar una exposición, comisariada por Hadas Maor, que incluye unas 15 esculturas grandes de destacados artistas contemporáneos, quienes las han adaptado especialmente a las condiciones de exhibición en el jardín. Se puede visitar previo registro hasta el 30.11, todos los días de 9 a 18hs. Más datos: wwHYPERLINK «http://www.jbgculture.com/»wHYPERLINK «http://www.jbgculture.com/».jbgcHYPERLINK «http://www.jbgculture.com/»uHYPERLINK «http://www.jbgculture.com/»lture.com
Entre las obras se encuentran obras icónicas de artistas como Menashe Kadishman o Dani Karavan, junto a las obras de artistas veteranos como Tsibi Geva, Yehudit Sasportas, Eli Gur Arie o Sigalit Landau. También obras de artistas más jóvenes como Ella Littwitz, Yaara Zach, Saher Miari, Moshe Roas, Guy Zagursky y más. Hadas Maor declara: “Tras la erupción de la corona, instituciones y centros culturales de todo el mundo se vieron obligados a detener sus actividades y el hecho de que la exposición en el Jardín Botánico se formó durante este período, a pesar de la enorme incertidumbre sobre su existencia, es particularmente digno de mención para mí”.
Maor también señaló que “el nombre del proyecto indica un regreso al exterior después de un largo período de cierre debido al brote del virus, pero también una dimensión de regreso a la naturaleza presente en el lenguaje escultórico local. En este contexto, el proyecto revela un movimiento constante entre obras que se basan en líneas definidas y materiales pesados, como el hierro o el bronce, y obras que utilizan materiales sintéticos como el caucho, el lino o el poliéster, y en formas suaves y redondeadas”.
Se crearon dos nuevas obras especialmente para la exposición y de acuerdo con el espacio del jardín: una obra sonora de la artista Maya Dunietz, que responde a los sonidos del jardín, y otra obra de la artista Yehudit Sasportas, un capítulo de la obra “Liquid Desert”. Colocando las diversas obras alrededor del jardín visible y el oculto, se produce un sendero circular en el que las plantas, así como las esculturas, son descubiertas por el visitante en movimiento.
Algunas de las obras tienen un diálogo formal, material y narrativo con la vegetación que las rodea, y otras conservan su extrañeza. Juntas, las diversas obras presentarán un prisma rico y en capas de trabajo escultórico local. Se puede visitar físicamente o realizar un recorrido virtual por la exposición en el sitio web del Jardín Botánico. Se ofrecen también actividades educativas para niños de forma gratuita en el recinto de la exposición y en el sitio.
Fotos: Elad Sarig