El grupo terrorista islámico Hamás envió una delegación a Teherán, que tiene previsto reunirse con altos oficiales iraníes. El cabecilla de Hamás, Ismail Haniyeh, manifestó su esperanza de que el encuentro sea fructífero.
La delegación está encabezada por el subjefe de la Oficina Política de Hamás, Saleh al Arouri. Estados Unidos ha ofrecido una recompensa de cinco millones de dólares por información que conduzca a la captura de Arouri.
Las conversaciones tienen previsto incluir una serie de temas, incluyendo la guerra civil en Siria y la retirada de Hamás de ese país árabe, una decisión que Haniyeh dijo que fue “procedural”.
El cabecilla de Hamás afirmó que su organización no intervendrá en los asuntos internos de Siria y deseó que el país se recupere rápidamente.
Haniyeh condenó también el encuentro que mantuvo el ministro de Exteriores de Bahréin con funcionarios israelíes en Estados Unidos como así también la visita de funcionarios israelíes y emiratíes a ambos países.
El ministro de Exteriores de Bahréin, Khalid Ahmed al Khalifa, manifestó que si no fuera por el apoyo económico que Irán brinda a los grupos terrorista de la Franja de Gaza, Israel y los palestinos estarían más cerca de alcanzar la paz.
El ministro de Bahréin acusó a Irán de usar el conflicto entre Israel y los palestinos para ganar influencia política en la región.
Irán apoya económicamente al ala militar de Hamás, las Brigadas Izz ad Din al Qassam, y al brazo armado de la Jihad Islámica, las Bigadas Quds.