Policías israelíes dieron muerte a un palestino que, según dijeron, empuñaba un “objeto sospechoso que parecía una pistola”, en la Ciudad Vieja de Jerusalén.
El joven de 32 años, identificado como Yad al Halak, un estudiante con necesidades especiales no entendió a los oficiales, emplazados en la Puerta de los Leones, que le dieron la voz de alto. Durante la persecución fue alcanzado por los disparos y falleció.
Tras una investigación preliminar de la policía, se determinó que el sospechoso, domiciliado en Jerusalén oriental, estaba desarmado y que era un discapacitado. El Departamento de Investigaciones de la Policía está revisando el incidente e indagando a dos oficiales de Guardia de Frontera.
Anoche en otro incidente, un motociclista atropelló a un combatiente de la Guardia de Frontera junto al puesto de control carretero de los túneles cerca de Jerusalén. El oficial, de 22 años, fue evacuado al Hospital Hadassah Ein Kerem de la ciudad santa con heridas leves en el pecho y el abdomen.
Los agentes de la Guardia de Frontera abrieron fuego contra el motociclista que se dio a la fuga. Una investigación preliminar determinó que la motoneta había sido robada. El conductor del rodado se entregó posteriormente a la policía. Las autoridades estiman que se trató de un incidente delictivo y no un ataque terrorista.
Horas antes, combatientes de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) desbarataron un ataque con un vehículo cerca del Manatial Meir en la zona de Halamish, en Cisjordania (Judea y Samaria). El terrorista palestino que intentó atropellarlos fue abatido a balazos, mientras que los soldados resultaron ilesos.
Una serie ataques se ha registrado recientemente en Cisjordania y Jerusalén bajo el telón de fondo del anuncio de la Autoridad Palestina de suspender la coordinación en materia de seguridad con Israel, en respueta a los planes del primer ministro, Benjamín Netanyahu, de anexar los asentamientos de Cisjordania y el Valle del Jordán.