El primer ministro en funciones, Benjamín Netanyahu, lanzó una dura advertencia al grupo terrorista libanés chií Hezbollah, tras la amenaza lanzada ayer por su cabecilla, el jeque Hassan Nasrallah.
«Un alto miembro del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) [iraní] amenazó con que Irán destruirá Tel Aviv desde el Líbano y reveló la verdad: que Hezbollah es el brazo armado de Irán en el Líbano», recalcó Netanyahu durante una reunión del Gabinete de Seguridad en Jerusalén.
«Nasrallah lo negó, pero quiero aclarar: si Hezbollah se atreve a atacar a Israel, la organización y el Estado del Líbano, que permite los ataques contra nosotros desde su territorio, pagarán un precio muy alto».
Netanyahu aprovechó la oportunidad para felicitar a su homólogo británico Boris Johnson por su apabullante triunfo en las urnas y aseveró que se trata también de «una victoria aplastante en la lucha contra el antisemitismo».
«Espero continuar con el trabajo para fortalecer la excelente relación de Israel con Gran Bretaña, lo que es evidente en nuestras relaciones comerciales y turísticas, y les digo que también lo es en el tema de seguridad en la lucha contra el terrorismo», destacó el primer ministro.
El ministro de Energía, Yuval Steinitz, se hizo eco de las declaraciones de Netanyahu y aseveró que «Gran Bretaña y toda Europa se salvaron del peligro de Jeremy Corbyn. Un antisemita de un nuevo tipo, no del tipo que apoya exterminar a los judíos, sino a favor del exterminio del Estado de los judíos».