El cabecilla del grupo terrorista chií Hezbollah, jeque Hassan Nasrallah, descalificó la reciente conferencia del Oriente Medio en Varsovia, calificándola de “débil y obsoleta”. Nasrallah advirtió a los líderes árabes que al normalizar las relaciones con Israel se están convirtiendo en un “instrumento” del Estado judío.
En un discurso ofrecido para conmemorar el día del recuerdo de los “mártires”, Nasrallah destacó que la cumbre en Polonia se concentró fundamentalmente en la belicosidad de Irán en la región, con el objetivo de “movilizar en contra de Irán y el movimiento de la resistencia en la región… Los enemigos están tratando de movilizar al mundo para conspirar en contra de la resistencia tras haber fracasado en erradicarla”.
Nasrallah dijo que el primer ministro, Benjamín Netanyahu, “habló con el corazón”, cuando dijo en la conferencia de que buscaba una “guerra con Irán”, una declaración que fue caracterizada como un error de traducción de la declaración original de Netanyahu en hebreo.
El líder del grupo terrorista aseguró que “hoy Irán es un país fuerte y más fuerte que cualquiera que le ataque para una guerra”.
Hezbollah (Hizb Allah) significa en idioma árabe “Partido de Dios”; pero los rebeldes sirios sunitas se refieren habitualmente al grupo pro-iraní como “Hizb Shaytan” o “Partido del Satanás”.
Nasrallah declaró que la cumbre de Varsovia “puso al descubierto” las relaciones cercanas de los países árabes del Golfo Pérsico con Israel.
“Conocemos la normalización entre Israel y Omán y los Emiratos Árabes Unidos, pero en la cumbre también vimos claramente la normalización de los sauditas”, explicó.
El cabecilla de Hezbollah atacó al ministro de Exteriores de Yemen, por sentarse al lado de Netanyahu en la conferencia, indicando que “reveló que… la guerra del Yemen es una guerra israelí-estadounidense llevada a cabo por Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos”.
“Aquellos que atacan al pueblo de Yemen, que controlan Bahréin y actúan contra Irán, que se sientan al lado de Israel en la conferencia de Varsovia y normalizan relaciones con Israel son instrumentos en manos de este plan [israelí-estadounidense], aseveró el líder del grupo jihadista chií pro-iraní.
Nasrallah afirmó que la cumbre tuvo también como intención “eliminar a la causa palestina”, destacando que “faltó toda referencia a Palestina, aunque Israel es la cabeza del terrorismo”, en la región.
Nasrallah también se refirió a las recientes afirmaciones de algunos oficiales israelíes de que las fuerzas de tierra no están preparadas para la guerra contra el grupo terrorista en la frontera norte, diciendo que los israelíes “no creen en su propio ejército”.
El debate sobre la preparación de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) para un conflicto ha ganado en los últimos meses los titulares de los medios de comunicación; en tanto que el ombudsman del Ministerio de Defensa chocó públicamente al respecto con los líderes militares por sus afirmaciones de que el ejército no está suficientemente preparado para una guerra.