El lateral izquierdo de la selección española Ignacio (Nacho) Monreal aseguró que la Roja está «centrada en jugar al fútbol», ante su próxima cita mañana en Jerusalén contra Israel, y no le afecta la situación política que se vive en Cataluña.
Preguntado por cómo está afectando la crispada situación al equipo, Monreal contestó: «Nosotros, se dejó claro desde el primer día que estamos centrados en jugar al fútbol, el tema de política no nos incumbe y le vamos a dar prioridad al partido de mañana y en jugar al fútbol».
Respecto a la trayectoria que lleva la selección, el jugador del Arsenal aseguró que «el mérito es de todos, tanto de los jugadores como de los entrenadores, de cualquier miembro de la selección» y apuntó que «se está construyendo algo nuevo, algo que ha empezado con buen pie y la idea es seguir funcionando». EFE
Hace unos meses la selección española era una calamidad, como desde el Mundial de Brasil, y nadie hubiera creído que volvería a contar con Lopetegui, un entrenador sin experiencia con jugadores de élite, casi más conocido por sus desmayo en televisión o por un gol que le metieron en su estreno en el BarÇa por querer lucirse y que a la larga le costó la fama y titularidad como portero. Ahora que está cerca el Mundial de Rusia, los españoles llevan varios meses insultando y abucheando a Piqué por sus declaraciones a favor del referéndum catalán, y para completarlo hay cierto enfrentamiento con el defensa Sergio Ramos, el favorito de los pro-españolistas y del Real Madrid y algo así como un andaluz inculto pero más gracioso con los españoles y muy católico y muy español. Normalmente un jugador independentista no debería jugar en la selección, pero ni siquiera los vascos y catalanes lo dejan, aparte de por no haber muchas posibilidades de que la España actual permita el separatismo de una región, porque todo el mundo sabe que los partidos oficiales de selecciones de cierto nivel son los más seguidos por los aficionados y ganar una competición está muy por encima de ligas o Champions.