La Corte autoriza a estudiante de EEUU ingresar a Israel en un caso de BDS

Aeropuerto Ben Gurión Foto: David Shankbone Wikimedia CC BY-SA 3.0

Una estudiante estadounidense pro-palestina acusada de apoyar el boicot a Israel fue autorizada a ingresar al país, tras dos semanas de estar retenida en el Aeropuerto Ben Gurión, luego de que la Corte Suprema de Justicia dictaminara que su ingreso no puede ser prohibido bajo la polémica ley actual.
Lara Alqasem, de 22 años, había sido retenida en el aeropuerto durante quince días, tras arribar al país para estudiar en un programa de maestría de la Universidad Hebrea de Jerusalén.
El estado puso de relieve que Alqasem nunca estuvo realmente detenida en el aeropuerto, porque en todo momento podía regresar a Estados Unidos; pero prefirió disputar su entrada al país en los tribunales.
El estado destaca que Alqasem encabezó un grupo autodenominado “Justicia Por Palestina” en la Universidad de Florida, que actualmente apoya al movimiento de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) contra Israel.
La Corte Suprema dictaminó que la ley que prohíbe el ingreso de las personas que cumplen un rol clave en los boicots contra el Estado judío no se puede aplicar al caso de Alqasem, poniendo fin al conflicto que atrajo la atención internacional.
En la corte, Alqasem alegó en que no ha participado en actividades de boicot desde hace un año y medio, y se comprometió a no participar en el BDS en el futuro. Los abogados del Estado sostienen que despierta sospechas el hecho de que Alqasem borrara sus registros en las redes sociales y que sigue siendo una amenaza.
Al aceptar su apelación, la Corte anuló el fallo de un tribunal inferior que había confirmado la prohibición de su entrada al país bajo una ley de 2017 que prohíbe activistas del BDS ingresar a Israel.
Neal Hendel, uno de los tres jueces de la Corte Suprema que atendieron la apelación, manifestó: «La lucha contra los boicots es apropiada y vital, al igual que las acciones emprendidas por el Estado de Israel al respecto. Sin embargo, la acción concreta que tenemos ante nosotros claramente se desvía del rango de lo razonable y no puede ser aceptada», agregó.
Por su parte, los abogados de Alqasem, Yotam Ben Hillel y Leora Bechor, elogiaron el fallo: «La decisión de la Corte Suprema es una victoria para la libertad de expresión, la libertad académica y el estado de derecho. Israel tiene el derecho de controlar sus fronteras, pero ese derecho no le da al Ministerio del Interior un poder incontrolado para mandar de vuelta a todo aquel que considere indeseable».
En cambio, el ministro del Interior, Aryeh Deri, calificó el dictamen de «desgracia».
«¿Dónde está nuestra dignidad nacional? ¿En Estados Unidos, también ella se atrevería a actuar contra el Estado y exigir permanecer y estudiar allí? Examinaré las formas de prevenir la recurrencia de casos como este», apuntó Deri.


 

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