El ministro de Defensa, Naftali Bennett, anunció que el país cambiará su política de entrega de cuerpos de terroristas palestinos involucrados en ataques contra israelíes y retendrá los cadáveres como método de disuasión.
Bennett instruyó a las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) que detenga toda la transferencia de los «cuerpos de terroristas», «independientemente de la afiliación (a facciones palestinas) y la naturaleza del ataque que cometió o intentó».
«Los casos excepcionales quedarán a discreción del ministro de Defensa de acuerdo con las circunstancias (por ejemplo, menores)», indicó un comunicado gubernamental.
Según la ONG Betselem, Israel mantiene bajo custodia al menos los cadáveres de 52 terroristas palestinos que atacaron o intentaron atacar a israelíes desde septiembre de 2015.
En 2017, la Corte Suprema de Justicia no consideró legal esta política de retener los cadáveres de los terroristas en respuesta a una petición presentada por los familiares y pidió aprobar una nueva legislación al respecto.
El Gobierno apeló y la Corte Suprema validó este año esta práctica en función de las regulaciones de emergencia por consideraciones de la seguridad del Estado, el orden civil y la necesidad de negociar el regreso de los cuerpos de los soldados israelíes.
Esta medida es en cierta forma una reacción a la política del grupo terrorista islámico Hamás, que controla de facto la Franja de Gaza, donde retiene los cuerpos de dos soldados caídos durante la Operación Margen Protector (2014) y a dos civiles israelíes con problemas mentales, situación que se utiliza como moneda de cambio para un eventual intercambios con terroristas palestinos presos en Israel.
La nueva política presentada este miércoles se someterá al Gabinete de Seguridad, como «parte de un proceso disuasorio más amplio, y entrará en vigencia después de su aprobación». Aurora y EFE