El Centro de Información y Lucha contra el Coronavirus anunció que el país registró 1.668 nuevos contagios de COVID-19 en las últimas veinticuatro horas.
El 6,75 por ciento de las pruebas para diagnosticar el coronavirus ha resultado positivo.
El Centro, integrado entre otros por la Inteligencia Militar (AMAN) de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), indicó que hay 179 enfermos hospitalizados en grave estado. En el país existen 21.118 enfermos activos, una cifra que se duplica cada doce días. Desde el comienzo de la pandemia se han registrado 364 víctimas fatales.
Las ciudades que se han convertido en foco de la pandemia en los últimos días son: Jerusalén, Beit Shemesh, Beitar Illit, Lod, Ramle y Kiriat Malachi.
En este sentido, el director general del Ministerio de Salud, profesor Hezi Levi, manifestó: “Estoy muy preocupado por el aumento del número de enfermos y les hablo como médico. Respeten las instrucciones. Todos debemos usar mascarillas para no poner en peligro a quienes nos rodean. Eso es solidaridad”.
Levi se refirió a la apertura de los gimnasios y piscinas que fue autorizada ayer por una comisión parlamentaria de la Knéset (Parlamento), explicando que respeta la decisión pero que su posición es que hay temor de contagio en los gimnasios debido a que allí se realizan actividades aeróbicas sin mascarillas y las gotas de saliva que son despedidas al aire y se propagan a través de los sistemas de aire acondicionado. Levi añadió que también hay temor de contagio en los aparatos de entrenamiento.
Mientras tanto, un alto funcionario del Ministerio de Salud le apuntó al Canal 13 que Israel está “a un paso del confinamiento total”.