El presunto autor en 2014 del atentado contra el Museo Judío de Bruselas, Mehdi Nemmouche, fue imputado por terrorismo en París por los jueces que investigan el secuestro por jihadistas de cuatro periodistas franceses durante diez meses en Siria.
Nemmouche, que se negó a responder a las preguntas de un magistrado instructor en la capital francesa, adonde había sido trasladado desde Bélgica donde se encuentra en detención provisional, fue inculpado por «secuestro terrorista», explicó su abogado, Francis Vuillemin.
Vuillemin contó que antes de su comparecencia ante el juez, él se había entrevistado con su cliente durante media hora.
El cargo del que se le acusa tiene que ver con la captura en Siria de Didier François, Edouard Elias, Nicolas Hénin y Pierre Torres, que permanecieron retenidos allí, en manos de jihadistas, entre junio de 2013 y abril de 2014.
Tras ser arrestado en Marsella (sureste de Francia) en un control policial pocos días después del ataque del Museo Judío de Bruselas, Nemmouche, francés de origen argelino de 32 años, fue identificado por los periodistas como uno de sus carceleros, que se hacía llamar Abu Omar.
Según sus testimonios, lo reconocieron entre otras cosas por la voz (cantaba temas de Charles Aznavour). Y señalaron que era uno de los más duros de los que se encargaban de su vigilancia en Alepo, que profería continuas amenazas y torturaba.
El presunto terrorista llegó al Palacio de Justicia de París en un convoy de tres furgones fuertemente custodiado por el cuerpo de elite de la Gendarmería, y debe volver hoy mismo a la prisión belga.
Allí está en espera del juicio por el atentado de Bruselas en mayo de 2014, en el que fueron asesinadas cuatro personas, y que podría celebrarse a comienzos de 2018. EFE y Aurora