Estados Unidos ha «arrojado más de diez mil millones de dólares» en la ayuda a los palestinos, pero el esfuerzo no ha acercado la región a la paz o la estabilidad, denunció el embajador estadounidense en Israel, David Friedman, al explicar los motivos que llevaron al presidente de EEUU, Donald Trump, a detener el financiamiento a UNRWA, la agencia de refugiados palestinos de la ONU, acusada de “eternizar el conflicto”.
Friedman lamentó que los fondos de los contribuyentes estadounidenses, en lugar de ser utilizado de manera positiva, fueron gastados parcialmente en solventar los estipendios de la Autoridad Palestina a los terroristas, a financiar la educación que insta al odio, como así también a financiar una agencia como UNRWA que, mediante la extensión del estatus de refugiado a los descendientes de los refugiados palestinos, está perpetuando la cuestión de los refugiados, en vez de resolverlo.
«Desde 1994, Estados Unidos ha tirado más de diez mil millones de dólares en ayuda humanitaria a los palestinos», manifestó Friedman en un discurso con motivo de Rosh Hashaná (Año Nuevo Judío). «Sin minimizar la importancia de la atención médica y la calidad de la educación para los niños -y no lo minimizamos, ni siquiera por un milímetro-; hemos visto que esos gastos acercaran la región a la paz o la estabilidad, ni siquiera un milímetro», expresó.
«Para gastar los dólares que los contribuyentes que han ganado con mucho esfuerzo y para financiar libros de texto llenos de odio, les pregunto, ¿cómo se eso le suministra valor a Estados Unidos o a la región?»
Friedman agregó que Estados Unidos continuará buscando otras formas de apoyar a los palestinos.
«No se equivoquen, EE.UU. es un país generoso y nos encantaría, de verdad nos encantaría, invertir en esta región para el regreso de la inversión para la paz y la estabilidad en Israel y una mejor calidad de vida para los palestinos», aseveró. «De hecho, seguimos proporcionando fondos, proveemos el 40 por ciento de los fondos para la Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. ACNUR, en oposición a UNRWA, busca terminar con la situación de apátridas, no desplegarlos como arma política».
En vísperas de Rosh Hashaná, Friedman también hizo un llamado a la paz: «Vamos a dedicarnos a construir sobre nuestros grandes logros, para hacer que la relación Estados Unidos-Israel sea aún más fuerte, y para traer la paz, la prosperidad y la seguridad de la región».