El Gobierno brasileño condenó este jueves, «en los términos más vehementes», el lanzamiento de cohetes desde la Franja de Gaza contra la región central de Israel, donde se ubica Tel Aviv, informaron fuentes oficiales.
«Nada puede justificar el disparo indiscriminado de cohetes contra centros urbanos, en ataques que tienen como objetivo la población civil», señaló la Cancillería brasileña en un comunicado.
El Gobierno del presidente Jair Bolsonaro, en el poder desde el pasado 1 de enero y firme aliado del primer ministro, Benjamín Netanyahu, instó «a los grupos que controlan» la Franja de Gaza «a poner fin a los ataques».
Asimismo, destacó en la nota «la eficacia» del sistema de defensa antimisiles de Israel, llamado Cúpula de Hierro, que «interceptó uno de los proyectiles», pues el otro cayó en un área despoblada, de acuerdo con la Cancillería.
Dos cohetes lanzados desde la franja de Gaza contra Israel activaron las alarmas antiaéreas en el sur de Tel Aviv. El lanzamiento de proyectiles por parte de los grupos terroristas palestinos es intermitente, pero no es frecuente que los proyectiles se acerquen a a la ciudad.
Bolsonaro viajará el próximo domingo a Estados Unidos, en el marco de una gira internacional que lo llevará también a Chile e Israel, a los que considera como socios estratégicos.
La visita a Israel supondrá un paso más en la alianza estratégica entre ambos países que se inició con la llegada de Bolsonaro al poder y que tiene por objeto intensificar la cooperación en diferentes áreas, especialmente en ciencia y tecnología.
Aunque no lo ha confirmado desde que asumió la Presidencia, durante la campaña para las elecciones de octubre pasado, Bolsonaro manifestó su intención de cambiar la embajada de Brasil en Israel y trasladarla desde su actual sede en Tel Aviv a Jerusalén.
Esa posible mudanza generó malestar en muchos países árabes, que están entre los principales importadores de pollo de Brasil, que es a su vez uno de los mayores productores de aves del mundo. EFE y Aurora