Sucedió en Nuevitas, Camagüey, donde autoridades de educación le prohibieron a un niño judío el uso de la “Kipá” dentro del área de la escuela. Según comentó el padre (de Leosdán Martínez, el niño de 12 años), lo citaron a la secundaria América Latina y allí recibió la notificación. La Comisión creada para “Denuncias de Acoso Escolar” determinó que fue Leosdán quien habría desafiado a otros alumnos a pelear.
Los padres vienen denunciando desde principios de año agresiones por parte de los demás estudiantes, entre los que se encuentran hijos de dirigentes del gobierno. Esto genera un problema político religioso además de que se involucren poderes que no deberían incidir en las escuelas. Al determinar la culpabilidad del niño en las peleas, se determinó que en la evaluación de séptimo grado (año que está cursando actualmente) el incidente quedará registrado y que se le prohíbe el uso de la “prenda religiosa” en el ámbito escolar.
Regresando al tema de la familia Martínez, el padre considera que su hijo es víctima de discriminación por ser judío y por practicar la religión. Por ello, presentará una queja formal ante la Fiscalía de Nuevitas contra el Ministerio de Educación.