Durante la Segunda Guerra Mundial el muftí de Palestina, Haj Amin Al-Husseini, fue socio de Hitler y lo apoyó activamente. Fue responsable de una división musulmana de las SS que asesinó miles de serbios y croatas, por lo que fue declarado criminal de guerra. Entre otras atrocidades, Al-Husseini se opuso a la liberación de niños judíos de los campos de exterminio y, como resultado, 5.000 niños fueron enviados a las cámaras de gas.
En el aniversario de su muerte, el asesor de Abbas sobre Asuntos Religiosos y Relaciones Islámicas, Mahmoud Al-Habbash, elogió a Al-Husseini en su página de Facebook como “el gran líder nacional palestino, muftí de Palestina y jefe del Comité Superior Árabe, Haj Amin Al-Husseini, quien durante muchos años dirigió la lucha palestina contra los británicos y la ocupación israelí”, según reveló la organización Palestinian Media Watch.
Al-Husseini ha recibido otros honores de parte de la Autoridad Palestina. Hay una escuela en El-Bireh que lleva su nombre; el actual muftí de Jerusalén colocó una corona sobre su tumba para conmemorar el día de su muerte, y las Fuerzas de Seguridad Nacional de la Autoridad Palestina también lo elogiaron en su página de Facebook.