Alemania condena a “abuela nazi” por negar el Holocausto

Campo de concentración de Auschwitz Foto: Wikipedia CC BY 2.5 pl

La alemana Ursula Haverbeck, de 88 años, fue condenada a seis meses de prisión por negar el Holocausto y la existencia de las cámaras de gas en el campo de exterminio nazi de Auschwitz, pena que se suma a varias anteriores no ejecutadas mientras se resuelven los recursos que ha presentado.

En este caso la anciana se sentó en el banquillo del tribunal de primera instancia del distrito berlinés de Tiergarten, donde fue condenada por incitación al odio racial.

Selección de judíos húngaros en la rampa de Auschwitz Foto: Yad Vashem Dominio Público

La Fiscalía acusó a la negacionista reincidente por su intervención en un acto organizado en enero de 2016 en un local berlinés, donde afirmó varias veces que el Holocausto no había existido, «lo que dirían cada vez más y más judíos», y aseguró que no había «nada de verdad» en las cámaras de gas de Auschwitz, donde «no fueron asesinados ni millones ni cientos de miles».

Su última condena databa del año pasado, cuando un juzgado de Verden (norte de Alemania) la sentenció a dos años y seis meses de cárcel por negar también el Holocausto.

Su próxima cita con la Justicia será dentro de un mes, en la Audiencia provincial de Detmold (oeste), donde se estudiará el recurso que presentó contra la condena de ocho meses de prisión que le impuso un juzgado de la ciudad también el año pasado.

La anciana, que estuvo casada con el ex  funcionario nazi Werner Georg Haverbeck, fue condenada entonces por enviar una carta al alcalde de Detmold, Rainer Heller, en la que afirmaba que el campo de exterminio de Auschwitz fue un campo de trabajo.

En la ciudad se estaba juzgado a un antiguo guardia de Auschwitz, Reinhold Hanning, de 94 años, por complicidad en 170.000 casos de asesinato, y el proceso motivó a la octogenaria a redactar esa carta.

Hanning fue condenado a cinco años de cárcel por complicidad en los crímenes del nazismo, pero murió el pasado mes de mayo mientras aún estaban pendientes de resolución por parte del Tribunal Supremo los recursos presentados contra esa sentencia. EFE

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7 thoughts on “Alemania condena a “abuela nazi” por negar el Holocausto”
  1. ¡Qué lástima que aún haya gente idiota que insisten en que la tierra es plana! Hay casos en el que el fanatismos mahometano enceguece a los adeptos a esa religión y los convierte en descerebrados como es el caso de Amanidejab. El caso de esa anciana es el racismo, parece que cree de verdad en la raza aria, ¡tonta!

    1. Podes negar la existencia de Dios o dudar de la divinidad de Jesus o burlarte de Mahoma…pero no niegues o sometas a duda el Holocausto porque vas a la carcel.Llamativo no?

  2. Es curiosa esta costumbre del negacionismo que han cogido algunos seguidores del nazismo, y que repiten los niñatos de hoy día, cuando nadie en su sano juicio puede negar las numerosas pruebas y testimonios que existen. Por otra parte existen neonazis que no son tan mentirosos, en España un grupo de neonazis de Barcelona editó una revista a la que llamó Zyklon B, el gas que fabricó la actualmente multinacional alemana Bayer para las cámaras de gas. Puede que quieran hacer un juego del trilero porque en principio era un pesticida, lo utilizaron para desinfectar los pabellones donde dormían los prisioneros de los campos de concentración y al ver que muchos morían al obligarlos a entrar antes de que se ventilasen los barracones, decidieron utilizarlo en las duchas para envenenar con gas con mayor eficacia industrial. Antes normalmente usaban el gas de escape de camiones diesel para el método de enveneamiento por gas, también desde los mismos camiones donde trasladaban a los prisioneros, enfermos, impedidos, etc. que fueron asesinadas desde el comienzo del Tercer Reich. De todas formas el gas no fue el único método de asesinato que emplearon los nazis y sus aliados. El mismo régimen nazi eran expertos en el engaño, y para las organizaciones o autoridades extrajeras tenían preparado un campo de concentración más normal, además los prisioneros de guerra occidentales, aun conviviendo en los mismos complejos de campos de concentración y exterminio, gozaban de un trato más cercano a los tratados internacionales. Los republicanos españoles que estuvieron en Mauthausen consiguieron sacar muchas fotografías que sirvieron de prueba en los juicios contra jerarcas nazis que negaban saber nada. Los españoles fueron de los peor tratados al principio por los nazis, probablemente espoleados por las órdenes de Franco, pero con el tiempo pasaron a ver la evidencia de los distintos niveles de sadismo en el mente de los nazis, siendo los peor tratados o los que recibían las torturas y asesinatos más sádicos los rusos, cuando comenzó la ofensiva nazi en Rusia, gitanos y, sobre todo, los judíos. Otro lugar donde los neonazis pueden jugar al trile es con los ejecutores de las torturas y muertes, la maquinaria nazi en numerosas ocasiones dejó en manos de prisioneros elegidos a la fuerza y de los kapos, prisioneros privilegiados generalmente criminales alemanes, llevar a cabo los distintos procesos de la maquinaria de explotación sádica y exterminios, en muchos casos los nazis más bien eran supervisores a distancia o algunos supervivientes raramente los llegaban a ver. Por último, algunos de los peores campos de exterminio fueron destruidos, como el de Treblinka, o Sobibor que además antes de quedar destruido fue convertido a campo de concentración. Hace unos meses vi un reportaje para televisión del pueblo de Mauthausen, algunas ancianas austriacas eran novias de los nazis SS del campo, que eran de lo más hombres y apuestos para una mujer, y decían no saber nada de lo que pasaba, sólo que les preocupa la imagen del pueblo o tener que verlo en el museo de Israel. No sé si sabrán lo que parecía ser el plan final de los nazis para los pocos supervivientes que llegaron vivos a los campos de Mauthausen desde el resto de campos, los llevarían a las cuevas donde los prisioneros fabricaban armas, aviones y vehículos militares para los nazis, dejándolos allí engañados mientras decían que ellos tenían que ir al frente, en realidad las cuevas estaban preparadas con explosivos por una orden de los jerarcas nazis de no dejar a nadie vivo que sirviera de testimonio tras la inminente derrota, incluso tenían pensado asesinar a sus ciudadanos austriacos por si pudieran testificar por algún crimen.

  3. Perdón, los habitantes de MauThausen no niegan haber visto lo que ocurría, tan sólo unos pocos lo niegan o dudan, aunque los testigos que hablan vieron los crímenes parcialmente. El documental sobre los habitantes de Mauthausen en la actualidad:

    https://youtu.be/ioSosZt_e_A

    Para hacerse una idea general es necesario unir testimonios de supervivientes, aunque las imágenes que existen no dejan lugar a la duda.

  4. Por desgracia no son los nazis alemanes los únicos negacionistas, en otros países las colaboraciones antisemitas también tratan de negar su pasado, como en Polonia, en Hungría o en Rumanía, o en España donde la cosa tiene un matiz diferente, al haber sido un país fascista que recibió la ayuda militar de Hitler y Mussolini durante el golpe militar, ayuda que les sirvió a los nazis para probar las armas y tácticas que poco después utilizaron en Europa, pero España no participó en la Segunda Guerra Mundial, salvo la División Azul con 50.000 fascistas españoles que envió a Rusia, y posteriormente el régimen fascista de Franco dio un giro de 180º hacia occidente e incluso se volvió pro-israelí. Ya antes, cuando se veía venir que Hitler no iba a pasar por encima de Rusia como se creían y llegaba el invierno, Franco ordenó una retirada disimulada, al tiempo que empezó a dejar pasar unos pocos judíos por la frontera. Nada más acabar la Guerra en Europa el cuñado de Franco, Serrano Suñer, fue apartado de la vista y ordenó la destrucción de todos los documentos oficiales que pudieran relacionar a la España fascista con la Alemania de Hitler, y Serrano Suñer no volvió a decir nunca más que le gustaban tanto los nazis como había hecho tantas veces. A pesar de todo Franco la tomó con los masones, también volvió a enviar fascistas españoles y a vender armas y aviones a los árabes en la Guerra de Independencia de Israel en 1948 y años posteriores. En la actualidad historiadores ultraderechistas como Pio Moa y Cesar Vidal se dedican a enmarañar la poca información objetiva que se conoce sobre los crímenes fascistas durante la Guerra Civil y el régimen fascista, y por ejemplo tan sólo por una web sefardíta sobre Ceuta y Melilla se conocen los abusos y asesinatos que cometieron los falangistas contra los judíos españoles hasta que los militares les ordenaron parar, al parecer debido a un préstamo que recibió Franco de banqueros judíos del Norte de África. De la ayuda militar a palestinos y países árabes se puede decir lo mismo, hay que confiar, prácticamente en un acto de fe ciega, en una web de un judío español. El desastre de la pretenciosa política económica autárquica del régimen obligó a pactar con Estados Unidos a cambio de ceder varias bases militares, desde entonces Franco cambió en su gobierno a los más filonazis falangistas por los de la secta de el Opus Dei, se hizo crear la imagen de un padre protector del pueblo judío, y hasta suavizó un poco sus ataques contra los masones por ejemplo permitiendo que entre los americanos de las bases los masones abrieran logias dentro de las bases. En la intimidad u oculto bajo el seudónimo Joaquín o Jakin Boor continuaba con sus disparates contra todos los judíos y masones. Los crímenes fascistas contra los españoles republicanos son un tema tabú en la democracia actual, oficialmente se dice que existe un pacto de no agresión para que la transición y la democracia fuesen tranquilas, pero más bien parece un pacto unilateral de los «hijos de» que heredaron el poder en España, eso si no es el miedo a un nuevo golpe de estado de los fascistas como algunos militares y fascistas lanzan con frecuencia en público. Es una vergüenza que un país europeo occidental, supuestamente del mundo rico y culto, mantenga más de 140.000 cadáveres de asesinados por los fascistas en fosas sin identificar por las cunetas de las carreteras españolas, y el gobierno derechista no quiere saber nada del asunto. Por ejemplo el que fuera Presidente del Gobierno del partido derechista, José María Aznar, parece que no le gusta que se sepa que es de familia vasca, uno de sus abuelos fue un independentista que en cuanto comenzó el golpe de estado se cambió de bando y se hizo un fiel amigo de los fascistas, es más que probable que un periodista llamado Manuel Aznar que es mencionado en el libro «Los últimos españoles de Mauthausen» fuese el abuelo o el padre del ex-presidente Aznar, con la neblina informativa que existe en España es imposible afirmarlo, en cualquier caso este Aznar estaba al comienzo de la invasión nazi en París e informaba a los españoles al ver el gran cambio experimentado en las calles vacías de judíos: «Legiones de judíos y de masones cayeron sobre el pueblo francés como sobre un botín inmenso y allí hicieron cebo y carne para sus apetitos». Periodistas que viajaron con la División Azul también tenían informados a los españoles de lo que hacían los nazis, desde el bando nazi. Así que, al menos los españoles que sabían leer, conocían algo de lo que estaba ocurriendo.

    1. Perdón, el envío por parte de Franco de falangistas españoles, algunos entre los más perturbados filonazis antisemitas, más la venta de armas, vehículos y aviones a los países árabes aparece en un texto algo escondido por una web del Ministerio de Exteriores de España, al parecer es un pequeño trabajo de una universitaria en Colombia donde lo menciona en una nota a pie de página: «ESPAÑA, ISRAEL Y PALESTINA: PASADO Y PRESENTE DE SUS RELACIONES DIPLOMÁTICAS, ANA MARÍA CÓRDOBA HERNÁNDEZ – Universidad de La Sabana, Colombia». Como referencia indica Algora 1995. Aparte de esto, una vez hace bastantes años lo mencionó de pasada uno de los entrevistados en un reportaje de la televisión pública española, sin aportar ningún datos. Aparte de esto, también en el libro «Los últimos españoles de Mauthaussen», un gran referente objetivo sobre todo tras el incremento de las manipulaciones de la derecha en los últimos años, se analiza un poco la actuación del régimen y de Franco con los judíos, nada que ver con la versión oficial o las difundidas por los historiadores ultraderechistas de la España actual.

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